El día que conocí a Jack Kerouac

Era el verano de 1942 y yo estaba de paso por Nueva York, tenía que estar en Washington DC en cuatro días para unos asuntos que ahora no me gustaría mencionar. Celebraba mi 20 cumpleaños en esa ciudad enorme y sola. Bajé del hotel, si se le podía llamar así, y entré en un bar. No se si sería muy común que una chica entrase en cualquiera bar, sin acompañar, a pedirse una cerveza.Pero no me importaba demasiado.
Cuando entré, ahí estaba él sentado en una mesa con tres chicos más. Y me miraba. Y antes de que pudiese sentarme se levantó y me dijo que se llamaba Jack, que estaba emocionadisimo porque yo hubiese entrado en ese preciso instante porque sus amigos Allen y Bill se iban ya y que le encataría tomar una copa conmigo. No puede hacer otra cosa que decir que era mi cumpleaños, le entusiasmó. Así que empezamos a beber y hablar y quise casarme con él, me prometió que era la persona más increible que había visto y me lo creí y pasamos la noche juntos y miramos el cielo, y me llevó a escuchar música beat y vimos amanecer. Después me acompañó y me enamoré de él. Y ahí se terminó todo. Nunca más lo vi.

H.